Demichelis: “Le dije a River que Mastantuono era jugador para el Madrid”

Siendo entrenador de River Plate, Martín Demichelis (Córdoba, Argentina, 1980) quedó tan impactado con la deslumbrante aparición del joven Franco Mastantuono en el primer equipo que lo hizo debutar casi de inmediato en el majestuoso Monumental con sólo 16 años y cinco meses. Su instinto no falló. Bastión defensivo de River Plate, Bayern Múnich, Manchester City, Málaga, Espanyol y la selección albiceleste, su carrera como entrenador se encuentra en fase de transición tras su última aventura en Rayados de Monterrey. Sin ánimo de polemizar ni un ápice sobre el asunto Canales, Demichelis, recién llegado a España, analiza para AS la figura del nuevo fenómeno argentino.

¿Qué le trae por nuestro país?

En España he vivido momentos muy importantes con mi familia, como el nacimiento de mis hijas Lola y Emma. Finalicé mi carrera como jugador en el Málaga y luego decidimos quedarnos a vivir en Marbella, donde compramos una casa. También en Málaga comencé mi carrera de técnico como asistente de Míchel. Ahora es tiempo de resetear la cabeza, analizar, sacar conclusiones y esperar un nuevo desafío y este es el lugar ideal para hacerlo.

¿Tarda mucho en digerir el fin de una aventura como la de Rayados?

Los entrenadores sabemos que esta profesión es dinámica y somos nómadas. Fue una gran experiencia la que viví en Monterrey y creo que logramos hacer un equipo sólido y competitivo, pero así funciona este negocio.

¿Qué tal fue la experiencia con Sergio Ramos?

A Sergio lo llamé personalmente el año pasado para llevarlo a River, cuándo él ya era jugador libre. Me escuchó, lo pensó y a los días me lo agradeció, pero desestimó la propuesta. Al llegar a Rayados fue el primer jugador que pedí como refuerzo. Los dirigentes hicieron el intento, pero no se dio, y en este último mercado Sergio reconoció el gran esfuerzo del Monterrey y aceptó por fin el reto. Ha sido un gran orgullo haberlo dirigido.

Demichelis y Ramos.Miguel Sierra

¿Aún está a un nivel top?

Siempre dije que Sergio es un caso único, de laboratorio, para estudiarlo finamente. A sus 39 años mantiene una fisiología pocas veces vista. Su masa muscular, su fuerza, su intensidad y rapidez son de primer nivel, pero sobre todas las cosas destaco su ambición y su afán competitivo. Ramos es un ejemplo perfecto de intensidad táctica. Su forma de entrenarse es admirable.

¿Qué le impactó de Mastantuono para hacerle debutar tan joven?

Todo. Durante 2023, en mi primer año en el banquillo de River, venía escuchando el apellido Mastantuono. Yo conocía hasta los chicos del equipo Sub-17, pero Franco jugaba aún más abajo y no lo había visto jugar ni entrenar. Envié a una persona de mi confianza, Edgardo Sbrissa, para verlo. Al regresar me dijo que no era cierto lo que decían de él porque era incluso mejor que eso. Al día siguiente, en octubre de ese año, lo citamos para entrenar y me deslumbró inmediatamente.

Demichelis, en su etapa de River.Diego Haliasz

¿Qué le llamó más la atención del chaval?

Su personalidad y madurez. Se desenvolvía dentro y fuera de la cancha como un jugador mayor. Yo soy de respetar mucho en mi metodología la fisiología y los procesos del cuerpo humano. En pretemporada teníamos estipulado dosificarle las cargas de trabajo, pero ocurrió que no solo toleraba las exigencias físicas con normalidad sino que era de los que más destacaba en ese aspecto.

¿No dudó en ningún momento?

Estaba preparado. Después de verlo entrenar sabía que había llegado su momento. Sólo me preocupaba mucho conocer su entorno porque tenía claro lo que se avecinaba cuando se subiera al escenario principal. Pedí a Franco los teléfonos de sus padres. Hablé con Cristian y Sofía para alertarlos y percibir si ellos estaban preparados para lo que venía, porque les adelanté que iba a hacer debutar a su hijo. Les pedí ayuda para asimilar los acontecimientos que vendrían y noté a ambos muy sensatos y humildes. Ahí ya terminé de tomar mi decisión. Sólo me faltaba atar un cabo más.

¿Cuál?

Hablé con los dirigentes de River para darles la noticia y un consejo. Me reuní con el presidente, Jorge Brito, el vicepresidente, Matías Patanian, y el director deportivo, Enzo Francescoli. Les pregunté cómo estaba la situación de Franco con el club y me dijeron que estaban tranquilos porque tenía contrato. Hacía poco se había vendido a Claudio Echeverri al Manchester City y la hinchada estaba enojada con su venta prematura. No quería que se escapase también el próximo diamante.

¿Qué clausula tenía por entonces?

No recuerdo si me dijeron cinco o diez millones. Ahí les tuve que decir la verdad. Les dije que el fin de semana iba a debutar y que tenían que subir esa cantidad de forma urgente. Les comenté que Franco no iba a ser sólo una estrella en River, sino que era futbolista para el Real Madrid. Les hice ver que iba a valer mucho más que los 25 millones que el City pagó por Echeverri. Mis palabras fueron que Franco jugaría en el Madrid. Entonces ellos tuvieron la habilidad de llevar la cláusula hasta los 45 millones, algo de mucho mérito ya que los agentes no aceptan cifras tan altas para vender rápido a sus representados.

¿Por qué estaba tan seguro sin haber jugado ni un minuto?

Se veía venir por lo que mostraba en los entrenos. Un talento así no es nada común. Permítame contar algo más que me emociona. Cuando me abracé con Franco en mi último día en River le dije: “La próxima vez que te vea será cuando vaya a verte jugar con la camiseta del Real Madrid”.

JUAN MABROMATA

¿En qué basaba esa convicción?

En sus enormes cualidades para este deporte. Franco te llena los ojos cuando lo ves controlar un balón, gambetear, encarar un rival o patear un tiro libre y, además, entiende el juego de una manera asombrosa siendo tan joven. De todas formas, lo más llamativo es su abrumadora personalidad. No le pesa la presión ni la responsabilidad, no parece un chico de 17 años. Es absolutamente increíble.

¿Cuál es su posición ideal en el campo?

Yo lo coloqué, en la mayoría de sus participaciones, por el sector derecho. Me gustaba cómo lo hacía a pierna cambiada, pero puede hacerlo tranquilamente por el centro e incluso por el lado izquierdo también. Es un chico muy inteligente que entiende el juego.

¿Le preocupan las comparaciones que empiezan a surgir?

A Franco no hay que compararlo con nadie, hay que acompañar su evolución y disfrutar de él. Maradona fue Maradona, Messi es Messi y Franco va a ser Franco. Hay que cuidarlo, acompañarlo y no compararlo.

¿Es un jugador para marcar una época?

Ya lo está haciendo sin ser mayor de edad. Debutante en River con 16 años, futbolista más joven en jugar con la selección mayor de los campeones del mundo, venta por 45 millones siendo un adolescente,…Llámenlo época o como quieran, pero él es ya una realidad que brilla en el presente.

Noticias relacionadas

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp.

¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí